Opositores políticos
En 1933, el partido nazi se comportaba como un Estado dentro del Estado: poseía un ejército y una policía paralelos que sembraban el terror, se enfrentaban hasta en las calles con los democráticos y los militantes comunistas y agredían a los judíos. Una vez que estuvieron legalmente en el poder, los nazis pasaron inmediatamente a la acción.
En febrero de 1933, el incendio del Reichstag -el Parlamento alemán sirvió de pretexto para que Hitler culpara a los comunistas y arrestara a miles de ellos. En el mes de marzo, tras elecciones manipuladas bajo un clima de terror, Hitler obtuvo plenos poderes. A partir de ese momento, estuvo prohibido cualquier modo de oposición. Desde marzo de 1933, las cárceles estuvieron llenas y se abre el primer campo de concentración en Dachau.