Como toda experiencia de enseñanza - aprendizaje debe construirse en base a un programa, con recursos didácticos, en los que la sensibilidad y la emocionalidad sean componentes claves. Tres dimensiones son las que están continuamente implicadas: el CONOCIMIENTO, la EMOCIÓN y la ACCIÓN.

CONOCIMIENTO

EMOCIÓN

ACCIÓN

Recursos que desarrollen contenidos, saberes específicos que hacen a la otredad y a la diversidad

En nuestra planificación la emoción es una dimensión esencial; hacerle lugar a la sensibilidad ante el malestar o al sufrimiento del otro; al prejuicio y las historias personales.

La convivencia se manifiesta en los actos. No podemos quedarnos en las buenas intenciones o en proclamas altruistas. Las acciones concretas de un compromiso con la convivencia son la puesta en práctica de valores, la promoción de la solidaridad, la responsabilidad individual y social, la promoción de procesos de democratización y participación.