Los cuatro roles

Las víctimas
Son quienes sufren daño o perjuicio generado por otros, quienes padecen como consecuencia del odio, la persecución y el ensañamiento. Son personas a quienes se discrimina; quienes ven vulnerados sus derechos.

Las víctimas de hoy
Las víctimas de trata de personas, los esclavos en talleres textiles o en el campo; los excluidos por etnia, elección sexual, religión, país de origen; los discapacitados, los migrantes, los estigmatizados, los sin techo…
En la escuela son víctimas aquellos que se convierten en blanco de burlas, cargadas, humillaciones, por medio de acciones de violencia física o verbal.


Los victimarios
Los que ejecutan actos de persecución, quienes esgrimen ideas de superioridad, quienes odian, discriminan, golpean, torturan, asesinan y/o violan sistemáticamente derechos.
Son victimarios o criminales quienes cometieron crímenes y todos los que contribuyeron a que se cometan.

Los victimarios de hoy
Los que discriminan, acosan y persiguen a otros por su etnia, elección sexual, religión, país de origen, los que esclavizan a otros en talleres textiles o emprendimientos rurales; los que comercian con la trata de personas; los que explotan a trabajadores indefensos; los que se apropian de las tierras de los pueblos originarios; los corruptos y quienes los apañan; los que usan a los chicos para vender droga…
En la escuela, son victimarios u agresores aquellos que ejercen violencia en cualquier forma o grado contra otros miembros de la comunidad educativa.


Los protectores
Son los que asumen la responsabilidad de proteger a las víctimas – a veces, poniendo en riesgo sus propias vidas – con un fuerte compromiso por la ética, la justicia y la sensibilidad ante el dolor de otros. Son los que le enseñaron al mundo a seguir siendo humano, en medio de tanta inhumanidad.

Los protectores de hoy
Los que intervienen en una situación de discriminación, los que se involucran en proyectos de asistencia al dolor ajeno; los que trabajan en iniciativas sociales de ayuda; los que denuncian las violaciones de derechos y las discriminaciones; los que crean instituciones para albergar a los necesitados, los profesionales que donan su tiempo para asistir a otros; los educadores que construyen, los jóvenes que protegen a otros jóvenes…
Son protectores en la escuela quienes intervienen,  deteniendo  los actos de burla, o humillación.


Los observadores pasivos
Son quienes ven lo que sucede, los que están al tanto de hechos de persecución y del accionar de los victimarios; los que saben del dolor de las víctimas y, sin embargo, se mantienen al margen. Los cómplices que se ocultan detrás de la neutralidad.

Los observadores de hoy
Los indiferentes; los que siempre culpabilizan a otros; los que solo están interesados en salvarse; los que no denuncian; los que no se involucran…Son observadores en la escuela quienes son testigos de los hechos de violencia y a veces los estimulan, otras observan pasivamente o eligen mirar para otro lado.